miércoles, 18 de agosto de 2010

Abejaruco Europeo: Policromía Natural.

A mediados de abril, podemos empezar a ver, sobrevolando nuestros campos unas siluetas, agudizadas en sus cuatro extremos, con unos exóticos colores y unos continuos reclamos que recuerdan al silbato de un árbitro; podemos decir entonces que los primeros abejarucos ya han llegado, cruzando el estrecho desde sus cuarteles de invierno situados en África.
Estos preciosos, vivarachos y coloridos pajarillos nos acompañaran hasta el final de verano, volviendo a África allá por el mes de septiembre para pasar un invierno bastante más templadito que el nuestro…

Durante su estancia en la península ibérica, se dispondrán a buscar pareja, a aparearse, construir sus nidos y sacar adelante a sus crías para que estas puedan regresar a África a pasar el invierno; procesos todos ellos, los cuales, podemos apreciar sin muchas complicaciones, pero siempre con el máximo respeto a las aves.

Apenas tienen 4 meses para tantas tareas, por lo que, en Abril, cuando llegan extenuados por el largo viaje, forman sus colonias de verano (muchas veces de cientos de ejemplares), y sus hormonas no tardan en aflorar, pudiendo observar como buscan pareja entre los individuos de la colonia.




















Durante este periodo de tiempo, las aves se presentan muy alteradas siendo frecuente las riñas y gruñidos entre los individuos de la colonia, hasta que se establecen las parejas.

A lo largo de estos momentos de frenesí y de alta actividad, se pueden captar fotografías de acción en grupo, donde se retrate el comportamiento de estos animales durante esta época.





















Una vez las parejas ya están establecidas, se podría pensar que las aves se dedican a copular directamente, pero no amigos, el macho aún se tiene que ganar a la hembra, y hasta que no lo consiga, esta no dará su brazo a torcer…Durante unos días, el macho debe ofrecer a la hembra todo tipo de ofrendas, cebándola regularmente mientras esta espera tranquilamente en un posadero cercano.

Como anécdota puedo decir que durante una jornada de hide fotografiando abejarucos, pude observar como un macho cebaba a la hembra ininterrumpidamente con una periodicidad de unos 3 o 4 minutos desde las 7 de la mañana hasta las 12 del mediodía que terminó mi sesión, y al final no consiguió nada…por lo menos durante ese día…espero que al final la cosa fluctuara, porque el pobre se lo curró de lo lindo…jejeje.








Tras estas cópulas vendrá la puesta, la cual es única, y varía entre 4 y 7 huevos, blancos, lisos y brillantes. Pero antes de la puesta, el nido tiene que estar a punto. Estas aves, nidifican en taludes terrosos, generalmente fluviales, formando en ocasiones grandes colonias, y utilizando normalmente los mismos nidos entre un año y otro. Aunque hoy en día cada día son más los taludes de tierra que se derriban por culpa humana, en muchas ocasiones taludes donde los abejarucos tenían instalada la colonia del año anterior, y cuando vuelven a España, ya no están, por lo que deben de empezar de nuevo a excavar sus nidos, eligiendo una nueva ubicación….pero cada vez hay menos taludes donde anidar….con la consiguiente problemática que esto conlleva para estas aves….

Cuando los pequeñajos pollos de abejarucos ya han salido del cascarón, son los padres los que deben de cebarlos. Durante esta época el ir y venir de los padres al nido es frenética. Entrando constantemente al nido con presas en el pico y saliendo al instante a por más. Durante este periodo, si se coloca un posadero cerca del agujero donde está ubicado el nido, los abejarucos toman el posadero justo antes de entrar al nido cuando van a cebar a las crías, cerciorándose de que no hay peligro a la vista y posteriormente entrando al nido. En esos momentos podemos aprovechar para sacar fotografías, ya que cada vez que se posan traen algo diferente en el pico, desde abejas, hasta mariposas, libélulas, abejorros etc…por lo que las imágenes que consigamos siempre serán distintas…
Una vez las crías ya estén lo suficientemente grandes, saldrán del nido y en breve estarán preparadas para volar y acompañar a sus padres en su viaje transahariano de vuelta a África a finales de agosto principios de septiembre…para no volver hasta el Abril siguiente, anunciando el periodo de buen tiempo y llenando nuestros campos de color un año más.